Terry Riley es un compositor estadounidense que nació en 1935. Su obra In C es un ejemplo de música aleatoria. ¡¡¡¿Y eso?!!!
Calma, que el planteamiento es muy simple: el compositor escribió 53 fórmulas musicales, todas en el mismo tono (Do, claro). Empieza a tocar un instrumento, que mantiene el pulso con la nota Do, y los demás músicos van tocando cuando les apetece: tocan una de las secuencias, cuando se cansan de repetirla, pasan a otra, y después a otra, y así hasta que la pieza se acaba.
En fin, que es una obra indeterminada, en la que el azar juega un papel fundamental. Fijaos que no hay en la partitura dos secuencias iguales...
Estas son las instrucciones del propio Riley para interpretar la obra:
- Cada intérprete puede tocar cada motivo las veces que quiera, aunque siempre seguirá el orden establecido.
- Puede ser tocada por cualquier número de intérpretes, con cualquier instrumento melódico y a cualquier altura.
- Cada intérprete puede dejar de tocar o reincorporarse cuando quiera.
- Habrá un pulso fijo de negra, marcado por un Do agudo en algún instrumento.
Dicho esto, ¿podrán realizarse dos interpretaciones iguales? ¿Qué me decís?
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